La edad mediacon la que se realizan los tratamientos estéticos en España ha descendido considerablemente, de los 35 a los 20 años, según datos de la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME).
Aunque esta edad no hace referencia a los adolescentes, sí que evidencia que cada vez más las personas jóvenes optan por procedimientos de este tipo. Esa etapa tan temprana de la vida suele estar relacionada con un momento de cambios físicos y emocionales, donde puede haber una mayor susceptibilidad a la percepción y críticas sobre el propio físico, la autoestima y la salud mental.
Una reciente encuesta realizada en Italia, entre adolescentes con edades comprendidas entre 13 y 18 años, revela que el 78% de las chicas y el 54% de los chicos está insatisfecho con su imagen corporal, hasta el punto de que un 49,2% estaría dispuesto a realizarse una cirugía estética.
Incluso, algunos de los encuestados ya se habían realizado una cirugía estética para corregir la nariz, orejas o pechos, siendo mayor el número de chicos que chicas en este caso (5.3% vs 1.9%)
Está claro que hay que diferenciar entre una cirugía reconstructiva y otra meramente estética, por una patología ya sea congénita o adquirida, por un accidente o traumatismo. También hay que diferenciar los tratamientos del acné, que se considera una patología de la piel, y no un tema meramente estético. o el tratamiento de cicatrices por cirugías internas o accidentes, que además de una connotación estética pueden ser molestas y causar dolor o picor.
Por otro lado, llama la atención que, en otra encuesta realizada en Italia, el 14% de las adolescentes de 16 años desearía realizarse una cirugía de aumento de pecho. Asimismo, un número elevado de adolescentes desearía realizarse tratamientos con toxina botulínica, ácido hialurónico, cirugía de párpados, de definición de pectorales e incluso de reconstrucción del himen.