En el fascinante mundo de la belleza, no es necesario elegir entre tratamiento estético o cosmético. Su avance es tan completo que todas las opciones son posibles y muchas veces complementarias.
Aunque detrás de un buen cosmético siempre hay millones de horas de investigación y desarrollo, sus resultados se logran en capas superficiales de la piel y sus efectos no pueden compararse con los de un tratamiento láser estético: Los beneficios de uno y otro no son comparables, y por eso podemos decir que resultan complementarios.
En el proceso de envejecimiento cutáneo, por ejemplo, se alteran estructuras más profundas, a las que no pueden llegar los tratamientos cosméticos. Existe una pérdida de ácido hialurónico y colágeno, o desplazamiento de los depósitos grasos, que se tratan con diferentes técnicas y láseres médico-estéticos.
Los cosméticos trabajan niveles más superficiales de la piel y fundamentalmente juegan un papel preventivo, preparatorio o de mantenimiento. En pocas palabras, los cosméticos son los “deberes para casa”.
Por eso, son tan útiles cuando se emplean de forma conjunta a otros tratamientos láser estéticos. Son perfectos para mantener la higiene de la piel, seguir un tratamiento continuado por las mañanas y por las noches, que se adapte a diferentes niveles de radiación, temperatura o polución del aire. También proporcionan hidratación a la piel, lo que resulta en una mejora de su elasticidad y en un efecto barrera, ante patógenos externos o rayos ultravioletas, tan perjudiciales para la epidermis.
En resumen, no es acertado preguntarse por cuál de estos tratamientos, estéticos o cosméticos, debemos decantarnos, ya que ambas opciones juntas funcionan mejor. Al final, la estética y la cosmética son elementos clave que se entrelazan para realzar la belleza exterior y colaboran en este proceso permanente.
Si la estética se centra en la percepción y la apreciación de la belleza en su totalidad, la cosmética se adentra en el mundo de los productos y tratamientos que mejoran y cuidan el estado de la piel.
Realzar y mantener esa belleza es una labor permanente que se logra tanto con tratamientos estéticos como con productos cosméticos, como los láseres de Lutronic y los serums de Seriderm, la mejor combinación posible para mejorar y mantener la mejor versión de cualquier persona.
Cuando unimos estética y cosmética, obtenemos el equilibrio perfecto. La estética nos guía hacia una comprensión más profunda de la belleza, mientras que la cosmética nos brinda las herramientas para realzarla.
Así que la próxima vez que dudes entre estética y cosmética, recuerda: ¡Ambas, mejor! Las dos alternativas juntas se convierten en el mejor aliado para alcanzar una versión más radiante de ti mismo.
¡Celebra la armonía de ambas y deja que tu belleza brille con luz propia!